Uno, dos y tres. Que los choferes de colectivos levanten el paro del transporte, que hoy empieza el día 17 vigente, necesita sólo de tres pasos. Primero, que las empresas deben enviar una planilla con la clave bancaria única (CBU) y el monto de cada trabajador a la Secretaría de Transporte provincial. Después, que el Poder Ejecutivo tucumano deposite el sueldo de abril a cada empleado con los $ 153 millones enviados por la Nación en subsidios. Y por último, que la Unión Tranviarios Automotor (UTA) corrobore que los 3.800 empleados del transporte público tengan los sueldos en el cajero para levantar la medida.
Sin embargo, la receta no es tan fácil de realizar. El Gobierno provincial notificó ayer formalmente a las empresas, representadas en la Asociación de Empresarios del Transporte Automotor de Tucumán (Aetat), que por la ley 9.248 deben remitir la información de inmediato.
Hasta anoche a las 20.30, eran 23 las empresas que habían remitido los archivos de excel con la información bancaria. Si las firmas cumplen con el requisito, los dos pasos restantes hasta que se levante el paro demorarán unas horas.
“Hasta ahora 23 de 56 empresas han presentado la información bancaria, esperamos que lo hagan cuanto antes”, informó a LA GACETA Benjamín Nieva, secretario de Transporte provincial.
“La expectativa que tenemos es que se solucione este conflicto. Por eso ya cumplimos con la obligación del depósito del subsidio provincial y el subsidio nacional está a disposición de los empresarios pero deben cumplir con la ley provincial, que fija que nos deben acercar los datos de los trabajadores”, agregó Nieva. Aseguró que los fondos son suficientes: “por mes son $ 153 millones de subsidio nacional y $ 81 millones de subsidio provincial. Esos fondos sumados creo que alcanzan con creces para pagar sueldos y poder trabajar, como se comprometieron cuando se otorgó la concesión”.
Jorge Berretta, vicepresidente de Aetat, informó anoche que esperaban finalizar “cuanto antes” con los CBU y las planillas salariales. “Al mediodía tuvimos una reunión con funcionarios y a las 12.30 (por ayer) tuvimos la notificación oficial. Pedimos a las empresas que procesen los datos, que no es sencillo, y desde las 16 comenzamos a enviar todos los CBU de los empleados con el saldo a cobrar”, comentó.
“Aunque se levante la medida, tengo dudas de cómo podremos funcionar hasta la semana que viene, cuando se vence el plazo para pagar el sueldo de mayo. Porque hoy en día la recaudación no alcanza ni para cubrir el costo del gasoil. Venimos de enero, febrero, marzo casi sin clases y luego la pandemia, siempre difiriendo le pago de proveedores, tenemos que pagar de contado o no nos venden, tenemos cortadas las cuentas corrientes... Si bien tenemos intención, no podemos garantizar la regular prestación del servicio. La ley provincial es buena”, planteó Berretta. Y agregó: “toda la esperanza está puesta en los proyectos de Diputados para fijar por ley un régimen de subsidios para el interior. Pasamos por una pandemia donde necesitamos una asistencia extraordinaria para brindar el servicio”.
Cambio de sistema
El sistema de reparto de subsidios al transporte debe modificarse. Lo aseguró Enrique Romero, secretario de Tránsito de la Capital. “Desde hace una década el Transporte Público en Argentina carece de un plan estratégico para el sector, el transporte se libanizó. Hasta el 2018 se pagaban sueldos y se renovaban unidades, pero en el 2019 se produce la quita de subsidios, pedidos de aumento del pasaje, pago escalonado del salario, un descomunal incremento de insumos y paros razonables pero que no conducen a ninguna parte”, consideró el funcionario municipal. Y agregó: “hoy el Ministerio de Transporte de la Nación prioriza el AMBA (Ciudad de Buenos Aires y 42 municipios del conurbano) que cuenta con 840 kilómetros de red ferroviaria, 70 kilómetros de subterráneos, 18.000 ómnibus operados por 182 empresas, unos 40.000 taxis, 7.000 remises y 3.000 vehículos de oferta libre (Uber). Por eso en materia de subsidios el Interior no existe. Los trenes de Buenos Aires reciben el 100% de subsidios y los ómnibus del AMBA un 80% de subsidios contra un 35% o 40% del interior”.
Romero puntualiza que el Interior nuclea a unos 13.500 ómnibus (1.200 de Tucumán), que contienen a unos 40.000 trabajadores (4.000 de Tucumán), y cubre sus costos operativos con el 65% de tarifas y el 35% de subsidios, mientras que el AMBA los cubre con el 80% de subsidios y el 20 % de tarifas.
“En Tucumán, las 1.200 unidades consumen 4,6 millones de litros de gasoil (130 litros por unidad al día) por un monto de $ 337,5 millones, lo que representa el 35% del costo operativo de una empresa y $300 millones en salarios, lo que sumado representa el 57% del costo operativo, a lo que hay que sumar un 15% de lubricantes, cubiertas, respuestas y baterías, y un 5% de costo fijo de administración, lo que hace que los números no cierren. De esta crisis se sale con un plan que incluya subsidios equitativos para el interior, reconversión al GNC, incentivos fiscales y exenciones impositivas”, sugirió.